..:¡Feliz cumpleaños, Emilia!:..
Ya son 21 años. No lo puedo creer. Soy una niña-mujer. No será un buen cumpleaños, porque no habrá ni regalos ni torta. Pero eso es lo de menos. Lo importante es que este es un día para pensar. Quiero reflexionar un poco, sobre el período comprendido entre el día de mi vigésimo cumpleaños y este día. Hay mucho que pensar. Espero que éste sea un buen año, porque el que se va ha sido muy duro. Creo que me siento vieja. Ustedes dirán: "¡Pero si sólo tienes 21 años!". Es cierto, soy joven, pero me gustaría volver a tener 18 años. Pero sé que si volviera atrás cometería los mismos errores. Soy demasiado inmadura. Bueno, la mayoría de la gente de mi edad lo es. Pero en mi caso, creo que debo actuar como adulta, no seguir siendo una niñita. Es que también quiero aprovechar mi dulce juventud. No es tiempo de ponerse seria. Además, si actuara como una persona madura perdería mi esencia. No, quiero seguir hablando como una niña, jugando Mario, escribiendo en esquelas de Winnie The Pooh y viendo monitos animados. ¡Soy una niña!